martes, 27 de abril de 2010

Tonta Timidez

Como estrategia de la naturaleza para mantenerse viva, esta la necesidad de aparearse, de reproducirse, de compartir momentos sentimentales con personas del sexo opuesto.
Hablo por la parte que me toca, por los hombres -al menos en su gran mayoria, quien no se vea dentro de este grupo no se sienta aludido-.
Actuamos de manera completamente primitiva cuando de pronto nos interesa alguna chica. Cuando estamos en algun lugar y sentimos el peso de la mirada sensual de una mujer, o somos nosotros los encargados de lanzar esa mirada que tanto se siente; y percibimos algun gesto a cambio, por minimo que sea.
Hay momentos en los que no sabemos que decir, que hacer, como actuar, y optamos por mantener una mirada fija, natural, lujuriosa; y nos transformamos en algo que no somos en nuestro estado natural.
Sentimos algo de impotencia y a veces nos llenamos de valor para hacer otra cosa, pero de pronto lo volvemos a perder. No sabemos que hacer, si darnos un trago, o encender un cigarro, o hablar y reirnos con algun socio, o una flor hecha con cualquier papel que encontremos, o seguir simplemente, mirandola.
Solo por el miedo a ser rechazados aprovechamos la estupida excusa de "si de verdad esta pa' mi, nos volveremos a encontrar", y dejamos pasar la oportunidad de quizas una buena platica, un intercambio de telefonos, o algun encuentro mas cercano; y todo por esa tonta timidez que a veces se apodera de nosotros.