Nada es facil ni lineal. Por mucho que intentemos simplificar las cosas, y aunque en ocasiones casi lo logremos, no siempre es asi.
Hay tragos amargos que digerir, y malos ratos, y noches llorosas, y cartas cursis, y visitas locas.
A veces se nos presenta una separacion no querida por ningun implicado, pero muy necesaria. Ya sean politicos, economicos, sentimentales, de lejania, familiares, o de cualquier otra inclinacion el motivo, siempre duele.
Duele por la sencilla razon que la sensatez se apodera de nosotros, y frenamos los impulsos que vienen de muy adentro, solo por intentar hacer las cosas bien, por hacer lo mas sensato, lo mas maduro, lo mas logico, y lo que creemos mejor para todos.
Estos momentos marcan tu vida por el resto de la eternidad, y no hay forma posible de sacarlos de tu cabeza. Simplemente te queda el bello recuerdo anterior, y una utopica relacion.
Hay tragos amargos que digerir, y malos ratos, y noches llorosas, y cartas cursis, y visitas locas.
A veces se nos presenta una separacion no querida por ningun implicado, pero muy necesaria. Ya sean politicos, economicos, sentimentales, de lejania, familiares, o de cualquier otra inclinacion el motivo, siempre duele.
Duele por la sencilla razon que la sensatez se apodera de nosotros, y frenamos los impulsos que vienen de muy adentro, solo por intentar hacer las cosas bien, por hacer lo mas sensato, lo mas maduro, lo mas logico, y lo que creemos mejor para todos.
Estos momentos marcan tu vida por el resto de la eternidad, y no hay forma posible de sacarlos de tu cabeza. Simplemente te queda el bello recuerdo anterior, y una utopica relacion.
